Tres guías penitenciarios fueron asesinados este lunes 7 de abril en la vía Portoviejo-Calderón, en Manabí, cuando iban rumbo a su trabajo en la cárcel de El Rodeo. El vehículo azul en el que se movilizaban fue interceptado por sicarios que no dudaron en dispararles sin piedad. Los cuerpos quedaron dentro del carro, convirtiéndose en una escena dantesca que paralizó a los testigos. La Policía llegó rápidamente, pero los responsables ya se habían esfumado. Este es el tercer crimen de este tipo en menos de 15 días en la provincia. El 30 de marzo fue asesinado Edison García, agente de la cárcel de Jipijapa, y el 1 de abril cayó Miguel Tambaco, también funcionario penitenciario. Los tres trabajaban en centros carcelarios de Manabí, una provincia golpeada por el crimen organizado. El SNAI se pronunció para condenar los hechos y aseguró que se están haciendo operativos para dar con los asesinos. Los ataques, según analistas, buscan infundir miedo y demostrar control territorial. Los grupos criminales como Los Lobos y Los Choneros siguen generando terror en la zona. La cifra de muertes violentas en Manabí no para de crecer desde el inicio de 2025. En 2024 cerraron con 856 asesinatos y este año apunta a superar esa cifra. La situación carcelaria también empeora cada día, y el personal teme por sus vidas. La falta de protección para los guías deja claro que las mafias tienen el control. Mientras tanto, las autoridades siguen dando comunicados, pero pocos resultados. Los ciudadanos reclaman seguridad real, no discursos. La escena del crimen ya está bajo investigación, pero no hay detenidos. Los sicarios actuaron con rapidez y precisión. La violencia en las carreteras es otra alerta encendida en la provincia. La vía Portoviejo-Calderón se tiñó de sangre. La tensión se siente en el ambiente y el miedo ya es parte del día a día.