Ecuador se encuentra en vilo por el déficit de lluvias registrado en los últimos meses, según reporta el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi). Esta situación, especialmente crítica en el Austro del país, donde se encuentran los principales embalses que abastecen a las hidroeléctricas, ha llevado a una crisis energética con cortes de luz de hasta nueve horas.

Mónica Oñate, analista de pronósticos y alertas hidrometeorológicas del Inamhi, señala que aunque febrero presentó niveles elevados de lluvia, marzo y abril no han alcanzado la normal climatológica. Esto ha resultado en un panorama desafiante para las regiones que dependen de las precipitaciones para su suministro hídrico y energético.

La ubicación geográfica de Ecuador, explica Oñate, influye en la diversidad de fenómenos climatológicos que experimenta el país, como ondas atmosféricas, convergencia y divergencia de vientos, que impactan en la distribución de la humedad y la generación de lluvias.

A pesar de la previsión del Inamhi, que señala lluvias y tormentas en varias regiones del país, se espera que estas no alcancen niveles óptimos para mitigar la sequía en los embalses del Austro. Esta situación subraya la importancia de monitorear de cerca el comportamiento meteorológico y tomar medidas preventivas ante la posible continuidad de la crisis energética.