Un violento estallido sacude la Penitenciaría del Litoral. La noche del lunes se tiñó de pólvora cuando dos bandas enfrentaron, dejando un saldo de dos reos heridos, confirmó el SNAI. Los heridos, ya bajo cuidado médico, son el vivo reflejo de una violencia que no cesa.

Ante la detonación de violencia, "se activaron los protocolos de seguridad para neutralizar la situación", comunicó el SNAI. Esta reacción rápida busca proteger tanto a funcionarios como a los internos de un escenario que, sin duda, podría haber escalado a mayores.

La jornada, marcada por la tensión, había llevado al SNAI a solicitar previamente apoyo policial y militar. El objetivo: restaurar la paz en un centro penitenciario constantemente asediado por el descontrol de bandas criminales que, incluso, habían acumulado un arsenal alarmante.

Recientemente, tras múltiples operativos, se descubrió un depósito ilegal de armas. Fusiles de asalto, granadas, y hasta lanzagranadas se escondían en las sombras de los pabellones, poniendo en jaque la seguridad interna. Esta balacera es solo un eco más del profundo problema de seguridad que enfrenta el sistema carcelario del país.