Antonio Peré confiesa red de corrupción millonaria con Petroecuador


Empresario ecuatoriano movió millones en sobornos con contratos de petróleo, gasolina y asfalto
El nombre de Antonio Peré sacude al país. Este guayaquileño, exfuncionario del Conam y empresario petrolero, confesó ante un jurado en Nueva York haber sido el cerebro detrás de una de las redes de corrupción más grandes ligadas a Petroecuador. Peré admitió que recibió jugosas comisiones por intermediar contratos con empresas internacionales como Vitol, Gunvor, Trafigura, Sargeant Marine y Noble Américas. Operó desde Miami a través de sus empresas offshore y movió millones en contratos de petróleo, gasolina, fuel oil, asfalto y más. Solo con Gunvor, Peré dijo haber recibido USD 95 millones, de los cuales al menos 30 millones fueron a parar a bolsillos de funcionarios ecuatorianos. Nilsen Arias, José Agusto Briones, Mauricio Samaniego y hasta Francisco Acosta Coloma fueron mencionados como receptores de sobornos. Las coimas se pagaban por cada barril exportado, usando contratos ficticios desde empresas fachada. Incluso, uno de los primeros esquemas fue con Trafigura, que operaba a través de la estatal uruguaya Ancap como pantalla. En todos los casos, Peré usaba compañías de papel y cuentas internacionales para mover el dinero. También reconoció su papel en contratos de asfalto por parte de Sargeant Marine, con sobornos de hasta USD 2 por barril. Fue detenido en 2019, tras el allanamiento del FBI a su oficina en Miami, y desde entonces coopera con la justicia de EE.UU. Como parte de su acuerdo, debe devolver más de USD 43 millones; hasta ahora ha pagado 17 millones. Su testimonio ha destapado nombres, esquemas, montos y mecanismos que comprometen a actores políticos y económicos de alto nivel. Mientras tanto, en Ecuador, algunos involucrados siguen sin ser procesados. Las investigaciones continúan, pero la bomba ya estalló. Las conexiones entre política y corrupción petrolera quedaron al desnudo. Y ahora, todos miran hacia Petroecuador.