La JEP recuperó seis cuerpos de personas desaparecidas en 2002 en La Escombrera, Medellín. Cuatro víctimas ya fueron identificadas y entregadas a sus familias. Las entregas permitieron brindar sepultura digna tras más de dos décadas. El hallazgo fue liderado por el Grupo de Apoyo Técnico Forense de la JEP. Se removieron unos 56.000 metros cúbicos de escombros. Las excavaciones alcanzaron profundidades de hasta 30 metros. Según la JEP, los restos presentaron conservación cercana al 85%. También mostraron heridas por arma de fuego. Esto confirmó a La Escombrera como escenario de desaparición forzada y ejecuciones. Dos hombres jóvenes, presuntamente desaparecidos por el Bloque Cacique Nutibara en 2002, fueron entregados en julio. Una mujer de 20 años y un hombre de 28, habitantes de la Comuna 13, fueron sepultados en abril. La recuperación se dio bajo una medida cautelar de 2020 de la Sección de Ausencia de Reconocimiento de Verdad. Esa decisión respondió a una solicitud del MOVICE y organizaciones de la Comuna 13. Uno de los mayores retos fue la reconstrucción del terreno. Hubo crecimiento irregular del barrio sobre antiguas zonas de extracción, señaló el magistrado Gustavo Salazar. La confirmación de identidades validó que se trabajaba en un terreno de 2002 a 2004. Esto fortaleció el Subcaso Antioquia del Caso 08. Ese expediente investiga crímenes entre 2001 y 2004 atribuidos a integrantes de fuerzas públicas en alianza con paramilitares y civiles. La JEP ordenó un proyecto de memorialización en La Escombrera con entidades nacionales y locales. La iniciativa buscó fortalecer la memoria y dignificar a mujeres y familias que sostuvieron la búsqueda.