Ecuador ha recibido un importante refuerzo en su poder aéreo con la adquisición de un avión militar Hércules C-130H, donado por Estados Unidos. Esta aeronave, destinada a las Fuerzas Armadas ecuatorianas, llegó a la Base Aérea de Cotopaxi, en la provincia de los Andes, como una medida para combatir el crimen organizado y responder a situaciones de emergencia meteorológica.

El avión, ahora matriculado como FAE 898, tiene capacidades versátiles que incluyen el transporte de hasta 92 pasajeros o 74 camillas. Esto lo convierte en una herramienta valiosa para desplegar tropas, vehículos y realizar evacuaciones médicas en momentos críticos.

La entrega de esta aeronave fue el resultado de una colaboración entre ambos países, evidenciando una sólida alianza en materia de seguridad. El embajador de Estados Unidos en Ecuador, Michael Fitzpatrick, destacó la importancia de este gesto, subrayando el compromiso de fortalecer las capacidades militares ecuatorianas.

Además del avión, se anunció una financiación de 10 millones de dólares para revitalizar la flota de aviones A-29 Super Tucano, utilizados para la protección de las fronteras y costas ecuatorianas. Esta ayuda se suma a otras entregas recientes de armamento y equipos por parte de Estados Unidos.

El avión será fundamental para las operaciones en la frontera con Colombia, donde se enfrenta un conflicto armado contra grupos terroristas y narcotraficantes. También se utilizará para apoyar operaciones internas y proporcionar ayuda humanitaria en casos de desastres naturales.

La ceremonia de recepción contó con la presencia del presidente de Ecuador, Daniel Noboa, quien reafirmó su compromiso de seguir combatiendo el crimen organizado y proteger la seguridad nacional en colaboración con las Fuerzas Armadas y la Policía.