Estados Unidos enfrenta una de las peores olas de frío en su historia reciente. Ciudades como Chicago, Nueva York y Washington están bajo alerta debido a temperaturas extremadamente bajas y fuertes nevadas. El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) ha emitido alertas de tormentas invernales, con previsiones de acumulaciones de nieve de hasta 60 centímetros en algunas áreas.

La sensación térmica en algunas partes del país ha alcanzado los -57 grados Celsius, un fenómeno climático que ha provocado múltiples problemas. Desde interrupciones en el suministro eléctrico hasta impactos significativos en los campos petrolíferos de Dakota del Norte, las condiciones extremas están afectando la vida diaria de millones de estadounidenses.

En Nueva York, la temperatura matutina se situó en 3 grados Celsius, pero la sensación térmica descendió a ocho bajo cero. En ciudades como Montpelier, Vermont, el termómetro marcó -8°C, agravado por vientos que hacen sentir aún más el frío. Por otro lado, en Washington D.C., el gobierno federal retomó sus actividades tras una suspensión parcial debido a las condiciones climáticas adversas.

La tormenta, apodada ‘Indigo’ por The Weather Channel, ha dejado un manto de nieve y hielo en lugares como Portland, Oregon, causando apagones y afectando a más de 70.000 usuarios. Las bajas temperaturas también han impactado a los vehículos eléctricos, con un informe de la plataforma Recurrent señalando una reducción del 30% en la autonomía de las baterías de estos autos a temperaturas bajo cero.

Las autoridades han confirmado al menos 30 muertes relacionadas con el temporal, afectando a un estimado de 65 millones de personas en el país. Los estados desde Oregon hasta Arkansas, y desde Wyoming hasta Maine, están lidiando con las consecuencias de estas severas condiciones invernales.

El pronóstico del NWS sugiere que estas condiciones continuarán durante los próximos días, instando a los ciudadanos a tomar precauciones y seguir las indicaciones de las autoridades locales.