Al menos 11 personas murieron cuando un avión de carga de UPS se estrelló al despegar del Aeropuerto Internacional Muhammad Ali de Louisville. El hecho ocurrió el martes alrededor de las 17:15 hora local, generando una enorme columna de humo negro. El gobernador Andy Beshear indicó que los tres tripulantes probablemente estaban entre los fallecidos. Varias personas resultaron heridas y los equipos de emergencia advirtieron lesiones muy graves. Las autoridades señalaron que el número de víctimas podría aumentar conforme avancen las labores. Por ahora la investigación es preliminar y los peritos dijeron que es temprano para definir la causa. El incendio tomó fuerza por la gran carga de combustible que llevaba la aeronave rumbo a Hawái. Según los reportes, el MD-11F transportaba unos 144.000 litros de combustible al momento del impacto. No se confirmó qué mercancía iba a bordo, y se descartaron materiales con alto riesgo de contaminación. La explosión afectó al menos a dos negocios cercanos, entre ellos una empresa de reciclaje de petróleo. Se ordenó refugiarse en un radio de cinco millas y luego la medida se redujo a una milla. El aeropuerto canceló todas las salidas del martes por la noche mientras atendían la emergencia. El jefe de Bomberos de Louisville, Brian O’Neal, describió el derrame como una situación muy peligrosa. Beshear pidió a la población mantenerse alejada del área por el riesgo de nuevos estallidos. La NTSB quedó a cargo de la investigación y su equipo tenía previsto llegar este miércoles. El avión implicado era un MD-11F de tres motores con 34 años de servicio. Nació como avión de pasajeros en Thai Airways y pasó a la flota de UPS en 2006. En 2023, UPS y FedEx anunciaron planes para retirar paulatinamente sus MD-11 como parte de la modernización. UPS lamentó el hecho y suspendió temporalmente la clasificación de paquetes en Worldport, su gran centro en Louisville. El alcalde Craig Greenberg y autoridades locales hablaron de una tragedia que la comunidad no olvidará.