En la parroquia Marcos Espinel se realizó una capacitación sobre manejo de desechos orgánicos y turismo gastronómico en la cuarta semana de septiembre. Participaron 11 personas de la comunidad con ganas de mejorar sus emprendimientos. La jornada contó con el respaldo del Gobierno Provincial de Tungurahua y su equipo técnico de los Planes de Manejo de Páramo. La formación en desechos orgánicos entregó herramientas claras para el compostaje. También abordó la separación de residuos con ejemplos aplicados al entorno local. Se explicó el aprovechamiento de materiales biodegradables para reducir la contaminación.

Con estos pasos se buscó mejorar la salud ambiental de la parroquia. El curso motivó a usar los recursos naturales de manera más responsable. El módulo de turismo gastronómico conectó la cocina con la identidad de Marcos Espinel. Se resaltó que la identidad culinaria impulsa el turismo comunitario. Hubo prácticas de presentación de alimentos para lucir los platos locales. Se mostraron ideas de innovación en los servicios turísticos para atraer visitantes. Se trabajó en crear valor agregado desde la tradición gastronómica de la zona. A la par arrancó el taller de fortalecimiento culinario para afinar técnicas en cocina. Los participantes practicaron preparaciones con énfasis en productos locales. Esta estrategia apuntó a elevar la calidad de la oferta gastronómica parroquial. También buscó dinamizar el turismo y abrir nuevas opciones de ingreso familiar.

Los asistentes coincidieron en que estos espacios mejoraron sus capacidades y su ánimo emprendedor. Además vieron una puerta para promocionar el turismo desde la riqueza cultural y productiva del lugar. La entidad provincial brindó acompañamiento metodológico, materiales y asesoría especializada, mostrando su compromiso con un desarrollo sostenible y con la economía rural.