Este 17 de julio, la Policía Nacional ejecutó un operativo de película: “Gran Fénix 33”. El resultado fue contundente: siete personas fueron capturadas por formar parte de una peligrosa banda dedicada al robo de carros y ataques a entidades financieras. La operación fue dirigida por la Policía Judicial y la Fiscalía, luego de cuatro meses de seguimiento. El grupo delictivo operaba en Cotopaxi, Tungurahua y Portoviejo, afectando gravemente a la seguridad ciudadana. Entre sus actividades estaba el robo de vehículos, asaltos a bancos y venta de lo robado en el mercado negro. Los allanamientos se hicieron con unidades tácticas, y se recuperó una moto, un carro, celulares y un revólver. Uno de los cabecillas, Darwin O., tiene un largo historial de delitos, incluidos robos, tráfico de drogas y porte de armas. Francisco C. ya había sido detenido dos veces por asesinato. También fueron detenidos Jairo Z., Jorge C., Jairo O., Yoel F. y Manuel T. Todos están bajo custodia y serán procesados por asociación ilícita. La Policía confirmó que esta banda estaba bien organizada y había generado temor en varias zonas. Gracias a este golpe, se espera reducir los robos en estas provincias. La operación demuestra que las autoridades están decididas a no dejar impune el crimen. La captura se dio sin enfrentamientos y con pruebas claras. Los celulares incautados ayudarán a profundizar la investigación. La comunidad espera que este golpe sea el fin de esta red criminal. Los detenidos fueron puestos en manos de la justicia. Con esto, la Policía busca devolver la tranquilidad a las familias. El operativo fue considerado un éxito por la contundencia de los resultados. Las investigaciones seguirán para dar con más implicados. La lucha contra el crimen sigue activa y con fuerza. La seguridad vuelve poco a poco a las calles.