La jueza Nubia Vera aceptó la acción de protección interpuesta por Verónica Abad y dejó sin efecto la suspensión de 150 días que pesaba contra la vicepresidenta de la República. Esta decisión se dio a conocer en una audiencia realizada el 23 de diciembre en Quito.

Abad acudió presencialmente, acompañada de su equipo legal y portando una bandera del Ecuador. Por su parte, la ministra del Trabajo, Ivonne Núñez, y el abogado de la Procuraduría participaron de forma telemática.

La jueza Vera argumentó que el proceso administrativo impulsado por el Ministerio del Trabajo vulneró los derechos de Abad al debido proceso. Explicó que el acuerdo ministerial utilizado no aplica para funcionarios del Servicio Exterior, categoría bajo la cual se encuentra la Vicepresidenta tras su nombramiento como embajadora en Israel.

Además, la magistrada señaló que la suspensión de 150 días excede el límite legal de 30 días establecido en el Reglamento de la Ley de Servicio Público. También recalcó que, como funcionaria de elección popular, Abad está excluida de sumarios administrativos.

En su sentencia, Vera ordenó que se anule el sumario administrativo y que la ministra Núñez ofrezca disculpas públicas a la Vicepresidenta.

En un giro inesperado, la jueza denunció presiones del Consejo de la Judicatura. Según Vera, autoridades como Mario Godoy y Jorge Carrillo intentaron influir en su decisión con amenazas de destitución y entregándole instrucciones en una memoria USB.

Vera responsabilizó a estas autoridades por cualquier daño a su integridad o la de su familia, y aseguró que su carrera está en peligro por no ceder a las intimidaciones.

Tras el fallo, Abad anunció que revisará el documento con su equipo y pidió al Gobierno garantizar la seguridad de la jueza. Además, confirmó que retomará sus funciones en la Vicepresidencia de inmediato.