El saldo migratorio de Ecuador en 2024 dejó un impacto preocupante: 94.767 ecuatorianos viajaron al extranjero y no regresaron, según cifras del Ministerio del Interior. Este fenómeno posiciona a 2024 como el segundo año con peor saldo migratorio en los últimos ocho años.

El principal destino de los migrantes fue El Salvador, utilizado como ruta para llegar a Estados Unidos. De los 70.012 ecuatorianos que viajaron a ese país, solo 11.460 retornaron, dejando un saldo de 58.552 personas que continuaron su camino hacia Norteamérica.

La crisis económica y de seguridad que afecta a Ecuador tras la pandemia del Covid-19 ha impulsado una nueva ola migratoria. Desde 2021, con las restricciones de visa impuestas por México y Guatemala, los migrantes han buscado rutas alternativas como Nicaragua y, recientemente, El Salvador.

La estrategia de usar El Salvador como puente permite a los migrantes esquivar la peligrosa Selva del Darién en Panamá, conocida por sus riesgos naturales y la presencia de grupos criminales. Sin embargo, estas rutas también implican grandes peligros para quienes las transitan.

Desde 2017, 13 países se han consolidado como principales destinos de los ecuatorianos. Entre ellos, Estados Unidos lidera como destino final, seguido por países de tránsito como Colombia, Nicaragua, Panamá y México. A esta lista se suman Argentina, España e Italia, tradicionales destinos migratorios desde la crisis de los años 2000.

Aunque 2024 mostró una reducción del 21,9 % en el saldo migratorio negativo respecto a 2023, el fenómeno sigue preocupando a las autoridades, pues el número de emigrantes se ha cuadruplicado desde 2017.

La migración irregular continúa siendo una opción desesperada para miles de ecuatorianos que buscan mejores oportunidades en el extranjero. Ante esta situación, se hace urgente atender las causas estructurales de la crisis económica y social en el país.