Entre enero y agosto de 2024, la Agencia Metropolitana de Control (AMC) junto con el Cuerpo de Agentes de Control Metropolitano de Quito (CACMQ) ha ejecutado 670 operativos para retirar a los limpiaparabrisas que se ubican en diversas intersecciones de la capital. Estas acciones buscan restaurar el orden en la ciudad y combatir la sensación de inseguridad percibida por los ciudadanos.

Durante los operativos, se logró retirar a un total de 1.473 personas que ejercían esta actividad, lo que representa un promedio de seis personas por día. La mayoría de los involucrados, el 95%, son reincidentes, lo que refleja la persistencia del problema. Las autoridades han indicado que, en algunos casos, se ha encontrado a los limpiaparabrisas en posesión de armas blancas y sustancias sujetas a fiscalización, lo que ha generado mayor preocupación entre la ciudadanía.

La AMC argumenta que la presencia de limpiaparabrisas no solo afecta la seguridad, sino también el flujo vehicular y el orden público. Además, esta actividad ha sido asociada en ciertos casos con la explotación laboral, especialmente de menores de edad, lo que ha llevado a que los operativos sean cada vez más constantes y rigurosos.

El problema de los limpiaparabrisas en las calles de Quito no es nuevo, pero en los últimos meses ha cobrado mayor relevancia debido al aumento de denuncias ciudadanas por situaciones incómodas o peligrosas que surgen en los semáforos. Las autoridades locales han manifestado su preocupación por el riesgo que estas actividades representan tanto para los transeúntes como para los mismos limpiaparabrisas.