La Policía Nacional ejecutó desde la madrugada de este jueves 4 de septiembre un megaoperativo contra el crimen organizado en varias provincias del país, logrando desarticular una poderosa organización narcodelictiva con tentáculos en Europa. Los agentes realizaron 21 allanamientos en Pichincha, Guayas, Manabí, Loja y Zamora, donde incautaron armas, vehículos y droga lista para exportación. Tras 15 meses de investigaciones, en coordinación con la Fiscalía y Europol, se descubrió que esta banda contaminaba contenedores en puertos y hasta en alta mar, enviando cocaína hacia destinos como Grecia, Bélgica e Italia. Según la Policía, la estructura llegó a mover hasta 200 millones de dólares en el mercado ilegal. En total, se decomisaron 4,3 toneladas de cocaína y se capturó a 28 personas, entre ellas un ciudadano serbio y 27 ecuatorianos. El ministro del Interior, John Reimberg, y el comandante general Pablo Dávila participaron en los operativos y destacaron que la seguridad es prioridad del Gobierno. De los 28 detenidos, 11 fueron presentados como miembros clave de la organización y ya se encuentran a órdenes de las autoridades por tráfico de drogas. En la acción participaron 200 uniformados, 16 fiscales y dos agentes de Europol, marcando uno de los golpes más grandes contra el narcotráfico en lo que va del año. La organización usaba fincas, bodegas y hasta barcos para camuflar la droga y transportarla en contenedores rumbo a Europa. Las investigaciones revelaron que operaba en diferentes provincias estratégicas y mantenía conexiones con mafias internacionales. La operación transnacional refleja la presión que enfrenta Ecuador al ser parte clave de las rutas del Pacífico. En rueda de prensa, Reimberg aseguró que el Bloque de Seguridad no permitirá que el país sea plataforma para mafias extranjeras. La Policía también destacó que la cooperación internacional fue fundamental para el éxito del caso. Los allanamientos continuaban durante la mañana de este jueves en busca de más pistas. Con este golpe, se logra frenar una estructura que representaba una amenaza regional.