Desde inicios de 2025, el método de ahorro escalonado gana espacio en varias ciudades del país. La propuesta consiste en incrementar cada mes el monto destinado al ahorro. El aumento sigue una estructura progresiva diseñada según la capacidad de cada persona. Jóvenes que arrancan su vida laboral lo adoptan para ordenar sus finanzas. Educadores financieros lo describen como una puerta para crear hábito de ahorro. El esquema parte de un monto base que se incrementa mensualmente. Ese incremento puede fijarse como un porcentaje o como un valor adicional definido de antemano. La flexibilidad es clave para su uso en ingresos estables y variables. Quienes cobran por comisiones ajustan el alza a un porcentaje del ingreso recibido. Así mantienen continuidad incluso cuando las semanas llegan con montos bajos. La progresión mensual ayuda a formar un fondo que se sostiene en el tiempo. Los resultados se notan en periodos cortos y motivan a seguir la rutina. Con este sistema se apuntan metas de corto y mediano plazo. Entre los objetivos aparecen viajes, estudios, compra de equipos tecnológicos y el fondo de emergencia. Los programas de educación financiera detallan inicios con montos mínimos y avances a seis meses. Consultoras económicas señalan que el modelo refuerza la planificación y la disciplina de pago. Obliga a revisar ingresos y ajustar gastos antes de cada incremento mensual. Apps de gestión permiten registrar aportes, activar recordatorios y ver gráficos de avance. La digitalización facilita hacer ajustes cuando cambia el ingreso o se quiere acelerar el crecimiento del ahorro. Instituciones de educación financiera lo incluyen en talleres juveniles y expertos prevén que seguirá vigente mientras sea una opción práctica.