El Bloque de Seguridad ha decomisado 1.022.457 galones de combustible en lo que va de 2025. El dato representa un aumento del 78,9% frente a 2024. En 2024 se incautaron 571.337 galones, según el reporte oficial. El Ministerio de Defensa informó que este golpe causa pérdidas por USD 21,5 millones a grupos criminales. El combustible retenido corresponde en su mayoría a gasolinas, con 696.136 galones. El diésel suma 116.783 galones y se mantiene clave en operaciones ilícitas. Las autoridades señalaron que este derivado mueve maquinaria pesada en campamentos de minería ilegal. También se confiscaron 113.255 galones de gasolina blanca. Otros derivados alcanzaron 96.284 galones en el conteo. Los operativos han dejado la destrucción de 1.095 acoples clandestinos. Además se inhabilitaron 81 pistas artesanales utilizadas para actividades ilícitas. Se suman 28 pistas clandestinas desmontadas por efectivos militares. Las bandas identificadas en estos hechos son Los Tiguerones, Los Lobos, Los Choneros y Los Gánsters. El mapa del riesgo en poliductos ha incluido rutas como Libertad–Manta. También se han intervenido los tramos Libertad–Pascuales y Pascuales–Cuenca por repetidas perforaciones. La presión militar en estas zonas ha empujado a las mafias hacia el tramo Santo Domingo–Esmeraldas. En los últimos seis meses se ha reportado un repunte de ataques en ese segmento. Para responder, el Gobierno emplea un sistema de automatización y control en tiempo real. Con esta herramienta se detectan perforaciones desde el momento en que ocurren. La estrategia busca reducir vulnerabilidades y cortar las arterias logísticas del crimen organizado.