En un evento que ha conmocionado a la comunidad de Kalempang en Indonesia, una mujer de 45 años fue encontrada muerta dentro de una pitón de cinco metros. Farida, madre de cuatro hijos, había sido reportada como desaparecida, lo que desató una intensa búsqueda por parte de su familia y los vecinos del área.

La desaparición de Farida movilizó rápidamente a su familia y a los habitantes de la aldea. Tras horas de búsqueda, encontraron una pitón con una protuberancia anormal en su abdomen, lo que levantó sospechas inmediatas. La serpiente fue capturada y, al abrirla, descubrieron el cuerpo intacto de Farida en su interior, incluso con su ropa.

Este trágico suceso no es un hecho aislado en Indonesia. En el año pasado, en el distrito de Tinanggea, una pitón de ocho metros asfixió y devoró a un granjero. En 2018, una mujer de 54 años fue hallada muerta dentro de una pitón de siete metros en la ciudad de Muna, también en Célebes Suroriental.

La pitón reticulada, especie responsable de la muerte de Farida, es conocida por ser una de las serpientes más largas y fuertes del mundo. Estas serpientes se adaptan a una variedad de hábitats, desde bosques densos hasta áreas cercanas a asentamientos humanos. Son capaces de cazar y consumir animales de gran tamaño, incluyendo cerdos y ciervos. Su método de ataque consiste en morder a la presa y luego envolverla con su cuerpo, apretando hasta que la presa deja de respirar.