En la tarde del 25 de julio, el presidente de la República, Daniel Noboa, encabezó la sesión solemne en conmemoración de los 489 años de Fundación de Guayaquil. El evento, realizado en la explanada del Teatro Centro Cívico, reunió a importantes figuras del comercio y la política. Durante su discurso, Noboa hizo un llamado a los guayaquileños a resurgir como un pueblo unido, abierto al progreso y la paz.

El presidente destacó que Guayaquil es el corazón del comercio ecuatoriano, hogar de emprendedores, comerciantes y exportadores. Instó a los ciudadanos a enfocarse en lo que pueden hacer por la ciudad, más allá de lo que esta les ha dado. "La primera palabra que todos debemos aplicar es: defenderla", afirmó.

Noboa recordó los desafíos históricos que ha enfrentado la Perla del Pacífico, desde los saqueos piratas hasta los devastadores incendios. "Guayaquil no es la oscuridad donde intentaron sumirla. Es el faro que alumbra en el punto más alto del cerro", expresó, subrayando la resiliencia y fortaleza de la ciudad.

El presidente también abordó los eventos caóticos de enero pasado, cuando una ola de violencia y motines en las cárceles del país afectó a Guayaquil. Recordó cómo las calles se sumieron en el caos debido a años de desatención en seguridad. "No nos engañemos; lo que en 20 años crearon no se logra arreglar en unos meses", dijo Noboa, pero aseguró que se está trabajando para cambiar la situación.

Durante el evento, Noboa entregó 40 mil becas para mujeres, facilitando su incorporación al mercado laboral en diversos campos como la contaduría, técnicas de salud y enfermería. También mencionó la concesión de créditos PYME a más de 400 productores, con una inversión de 45.4 millones de dólares, para apoyar el comercio, servicios y la pequeña industria.

Además, destacó la condonación de deudas de BanEcuador, beneficiando a 321 personas de Guayaquil, y anunció acciones similares para agricultores a nivel nacional. Noboa reafirmó su compromiso con la ciudad, enfocándose en créditos, alivios financieros, atención social, becas y, sobre todo, seguridad.

Finalmente, el presidente instó a los guayaquileños a no permitir la impunidad, injusticia y corrupción. "Las exigencias son altas, pero la motivación de levantar esta ciudad es mayor", concluyó.