La Revolución Ciudadana (RC) presentó una nueva estrategia para destituir al presidente Guillermo Lasso: aplicar la figura constitucional de la "muerte cruzada", que consiste en disolver la Asamblea Nacional y adelantar elecciones. La propuesta surge en medio de un juicio político contra el mandatario, donde aún no se han presentado pruebas concluyentes para su destitución.

El comunicado emitido por la RC el 19 de abril argumenta que la "muerte cruzada" es la solución a la "grave crisis política y conmoción interna" que enfrenta Ecuador. Fuentes del correismo indican que esta propuesta es un "aviso" para que las bancadas reflexionen y sumen los 92 votos necesarios para ejecutar la "muerte cruzada".

En caso de no lograr los votos, se espera una conmoción que podría llevar a la renuncia de Lasso por presión de sectores sociales e indígenas. Se prevé que estos grupos se movilizarán en el exterior del Palacio Legislativo el día de la votación del juicio político, ejerciendo presión sobre los asambleístas.

Mientras tanto, en la Asamblea Nacional circulan rumores de amenazas a legisladores, similares a las ocurridas en junio de 2022, para que apoyen la destitución de Lasso.