La noche del 26 de agosto trajo consigo una devastadora noticia para Esmeraldas. Karelis Magallanes, una valiente agente de la Policía Nacional, encontró su final en manos de quien debía amarla. El presunto femicidio no solo es sorprendente por sí solo, sino que se realizó con la propia arma de dotación de la uniformada.

En las sombras de la comunidad de Taseche, a las 21h00, la tragedia se desató. La oficial fue sorprendida por su pareja, que utilizó su pistola para terminar con su vida y, poco después, con la suya. La escena fue descubierta cuando vecinos, alertados por los disparos, llamaron a la Policía Nacional.

Las razones detrás de este trágico suceso parecen ser “problemas personales”, según informes iniciales. Sin embargo, este hecho no solo se ha convertido en un duro golpe para los habitantes de Taseche, sino que evidencia uno de los mayores problemas nacionales: la violencia contra la mujer.

Los equipos forenses ya están en el lugar, trabajando para recabar toda la evidencia necesaria y llevar a cabo las investigaciones correspondientes.

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