Un reciente estudio realizado por neurocientíficos en Israel ha revelado que el olor corporal podría ser un factor determinante en la elección de nuestras amistades. Publicado en la revista Science Advances, el estudio sugiere que las personas que comparten un olor corporal similar tienen más probabilidades de convertirse en amigos cercanos, desafiando la idea de que las amistades dependen únicamente de la personalidad o el entorno social.

El estudio, que involucró a 40 personas formando parejas de amigos, utilizó una nariz electrónica equipada con sensores para detectar y clasificar la composición química de los olores corporales. Esta tecnología permitió elaborar perfiles detallados de los olores de los participantes y compararlos entre sí. Sorprendentemente, los investigadores encontraron que los amigos compartían un perfil olfativo más parecido entre ellos que con el resto de participantes.

Además de la tecnología avanzada, el estudio también utilizó el olfato humano para verificar estos resultados. Los "olfateadores" humanos confirmaron que las parejas de amigos tendían a oler de manera similar, lo que refuerza la hipótesis de que el olor desempeña un papel importante en la formación de vínculos entre las personas.

Los investigadores creen que este fenómeno podría explicar por qué algunas amistades surgen de manera instantánea, incluso cuando no hay un trasfondo social o de residencia compartido. Este tipo de amistades a primera vista, según el estudio, estarían determinadas por un olfato similar, lo que llevaría a un nivel de confort y afinidad entre los amigos.