En un giro sorprendente, la FIFA ha suspendido a Luis Rubiales, exjefe de la Federación Española de Fútbol, por tres años debido a su controvertido comportamiento durante la final de la Copa Mundial Femenina. La sanción se basa en la violación del artículo 13 del Código Disciplinario de la FIFA, que se refiere al "comportamiento ofensivo y violaciones de los principios del juego limpio".

Rubiales se hizo conocido a nivel mundial después de darle un beso a la futbolista Jennifer Hermoso tras la victoria de la Selección Española en la mencionada final. Sin embargo, esto no fue lo único que generó controversia. Fue criticado por tocar su entrepierna en una celebración de gol y por cargar a la futbolista Athenea del Castillo sobre su hombro.

A pesar de la suspensión provisional inicial de 90 días que la FIFA le impuso en septiembre, Rubiales se mantuvo en sus cargos como presidente de la Real Federación Española de Fútbol y vicepresidente de la Unión de Asociaciones Europeas de Fútbol (UEFA).

El exdirectivo no se ha quedado de brazos cruzados y ha anunciado que apelará esta decisión. En sus propias palabras, "Llevaré esto tan lejos como sea necesario para que se haga justicia y para que salga la verdad. A pesar de todos los esfuerzos de las instituciones, los políticos y los medios de comunicación, resulta cada vez más claro lo desproporcionado e injusto que es esto".