El mundo del cine llora la partida de Gene Hackman, quien falleció a los 95 años en su mansión de Santa Fe. La autopsia reveló un cuadro devastador de salud: graves enfermedades cardíacas, múltiples infartos y un avanzado alzhéimer. Su corazón, afectado por años de insuficiencia y daños crónicos, no pudo resistir más. Tenía un marcapasos especial desde 2019 y serios problemas renales. La tragedia fue doble, pues su esposa Betsy Arakawa murió días antes tras infectarse con un virus mortal transmitido por roedores. Los cuerpos fueron encontrados el 26 de febrero por trabajadores de mantenimiento. Hackman presentaba rastros de acetona en su sangre, lo que sugiere ayuno prolongado y complicaciones metabólicas. Durante la autopsia, se confirmó la presencia de infartos antiguos que afectaron gravemente su corazón. A pesar de los esfuerzos, el deterioro era irreversible. Su cerebro mostraba daños severos provocados por el alzhéimer. Mientras tanto, la mansión donde vivían estaba infestada de roedores en garajes y cobertizos. El Departamento de Salud confirmó que la casa principal estaba limpia, pero las construcciones externas eran un foco de infección. Entre los descubrimientos, encontraron nidos de roedores y hasta cadáveres de animales. Uno de los perros de la pareja también fue hallado muerto en la propiedad. Hackman, que había dejado todo su patrimonio a Betsy, tenía tres hijos que no recibirán herencia. Betsy, por su parte, había planeado que el dinero pasara a obras benéficas. La muerte de ambos estremeció a la comunidad de Santa Fe, donde eran muy conocidos. En las semanas previas, Arakawa había buscado en Internet síntomas de enfermedades respiratorias, preocupada por su salud. Los exámenes médicos descartaron intoxicación por monóxido de carbono en ambos cuerpos. La trágica historia salió a la luz luego de casi diez días de incertidumbre. Fox News Digital obtuvo los documentos que detallan este triste final. Hackman, un ícono del cine, dejó tras de sí un legado inolvidable, pero su última etapa estuvo marcada por la soledad y la enfermedad.