El juicio contra Dominique Pélicot ha conmocionado a Francia. El hombre, acusado de drogar a su esposa Gisèle Pélicot para que otros hombres la violaran durante años, ahora enfrenta nuevas revelaciones desgarradoras. Este viernes, en el Tribunal de lo Criminal de Aviñón, su hija Caroline Darian y su nuera testificaron, mostrando sospechas de que ellas también podrían haber sido víctimas de abusos cometidos por Pélicot.

Caroline Darian relató el devastador impacto que sufrió en 2020 cuando su madre la llamó para revelar lo que había descubierto sobre su esposo. Gisèle, tras años de abuso inconsciente, se dio cuenta de la terrible verdad cuando las autoridades encontraron miles de fotos y videos que mostraban los abusos que sufría bajo los efectos de ansiolíticos.

Darian, que solía tener una profunda admiración por su padre, describió cómo su vida se transformó al descubrir lo que este había hecho. "Amaba a mi padre, confiaba plenamente en él. Creía que era un hombre sano, amable y considerado", explicó al tribunal. Sin embargo, esa imagen se desmoronó cuando encontró fotografías de sí misma, desnuda y acostada, en los archivos de su padre. “Me había fotografiado sin que yo lo supiera”, declaró, agregando que tiene la firme convicción de que estaba drogada al igual que su madre en ese momento.

No solo Caroline compartió su testimonio, también lo hizo la nuera de Pélicot, quien reveló que había encontrado imágenes de ella tomadas sin su consentimiento mientras estaba en el baño. Además, expresó su temor por la seguridad de sus hijos, quienes solían quedarse solos con su abuelo, quien mostraba un comportamiento muy cariñoso hacia ellos.

Gisèle Pélicot, ahora de 71 años, fue violada repetidamente entre 2011 y 2020 por decenas de hombres con los que su marido había contactado para satisfacer sus deseos voyeristas. Todo esto se descubrió cuando Pélicot fue detenido en un supermercado por grabar a mujeres bajo sus faldas. Al investigar su material, las autoridades encontraron pruebas de los crímenes cometidos contra su esposa, quien no era consciente de los abusos.

Durante el juicio, Gisèle testificó con la esperanza de que su caso visibilice los peligros de la sumisión química, una práctica que ha afectado a muchas mujeres. Además de Dominique Pélicot, hay otros 50 hombres identificados y siendo juzgados por violación agravada, un delito que podría llevarlos a cumplir hasta 20 años de prisión.

El caso ha provocado una gran conmoción en Francia, y ha llevado a figuras públicas, como la estrella de telerrealidad Nabilla Vergara, a realizar campañas de recaudación de fondos para ayudar a Gisèle. Sin embargo, los abogados de la víctima han solicitado que no se realicen colectas en su nombre, ya que Gisèle no desea ese tipo de apoyo económico.

Este juicio ha revelado una serie de atrocidades y ha abierto un diálogo urgente sobre los peligros del abuso sexual y la necesidad de proteger a las víctimas de sumisión química.