La Ley de Alivio Financiero, aprobada recientemente por la Asamblea Nacional, entró en vigencia este lunes 9 de diciembre tras ser publicada en el Registro Oficial. Entre sus beneficios destaca la reforma al acceso del seguro de desempleo.

Ahora, las personas despedidas "por causas ajenas a su voluntad" desde noviembre de este año hasta febrero del 2025 podrán solicitar el seguro de desempleo a partir del décimo día de haber perdido su empleo, sin tener que esperar los 60 días que exigía la normativa anterior.

Este beneficio se extiende a quienes cumplan ciertos requisitos: tener al menos 24 aportaciones al IESS, de las cuales seis deben ser continuas antes del despido, realizar la solicitud dentro de los 90 días posteriores al despido y no estar jubilado.

El seguro se paga durante cinco meses y varía según el tiempo: el primer mes equivale al 70 % del Salario Básico Unificado, mientras que los siguientes meses disminuyen gradualmente hasta el 50 %.

El primer pago se entregará en un máximo de 30 días tras la solicitud y los posteriores serán automáticos y mensuales. Sin embargo, no se podrá acceder al beneficio si el empleador no está al día en los aportes o si el trabajador renunció.

Patricia Borja, experta en seguridad social, destacó que esta reforma es temporal. A partir de marzo del 2025, los despedidos deberán volver a esperar 60 días para acceder al seguro.

El número de beneficiarios del seguro de desempleo ha crecido este año. Hasta noviembre, 26 246 afiliados han accedido al beneficio, 2 650 más que en 2023.

La Ley de Alivio Financiero también incluye otras reformas destinadas a mitigar los efectos de la crisis energética y brindar mayor protección social a los trabajadores afectados.