Este 12 de noviembre, Ambato celebra 204 años de independencia y lo hace rindiendo homenaje a su emblemático Parque 12 de Noviembre. Este espacio, que ha visto pasar generaciones, refleja no solo la historia de la emancipación, sino también la identidad de la ciudad. Desde su origen como una plaza comercial y estación de tren, el parque ha sido un centro de encuentro y un símbolo de libertad, siendo testigo de la valentía de los próceres ambateños que lograron la independencia en 1820.

La historia del monumento del parque se remonta a 1920, cuando en el centenario de la independencia de Ambato, el escultor Celiano Monge diseñó un primer monumento. Este, de menor tamaño, estaba coronado por un cóndor que representaba el vuelo hacia la libertad. En 1930, el arquitecto José Mideros realizó una remodelación que incluyó un foco en la cúspide del monumento, simbolizando la flama de la libertad que, con el tiempo, se volvió un elemento esencial del paisaje urbano de Ambato.

En 1942, en una feria interprovincial organizada por la Cámara de Comercio de Tungurahua, el monumento fue modificado una vez más, ganando altura y detalles decorativos inspirados en el arte grecorromano, además de un faro de vidrio y metal que aún hoy ilumina el parque y destaca su importancia histórica. Cada cambio en la estructura representaba una etapa en la historia de Ambato, uniendo el presente con el pasado a través de símbolos perdurables.

El Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) declaró en 2004 al parque y su monumento como bienes patrimoniales, reconociendo su valor cultural. En 2007, el parque fue renovado con un espejo de agua y muros con arcos dorados que exhiben los nombres de los héroes de la independencia, integrando la memoria histórica de manera solemne en un entorno renovado.

Con el Proyecto Bicentenario en 2021, el parque y la avenida 12 de Noviembre adquirieron un diseño más moderno y seguro. La creación del boulevard de flores y otras mejoras trajeron una estética más inclusiva y accesible, haciendo que el Parque 12 de Noviembre no solo sea un lugar histórico, sino un espacio dinámico para los ambateños de todas las edades. Este lugar es un reflejo del espíritu de libertad que vive en cada rincón de la ciudad, destacando la constancia y el orgullo ambateño al recordar 204 años de independencia.