El reciente informe Global Wealth 2024 de Allianz destaca un dato revelador: los baby boomers, esa generación que creció en un entorno económico favorable y estable, se consolidan como los grandes ganadores en la acumulación de riqueza. Con acceso a viviendas enormes y un mercado de valores que duplicó el valor de sus ahorros, este grupo alcanzó un nivel de patrimonio que ninguna otra generación ha logrado.

El estudio explica que un baby boomer nacido en 1960 que ahorró un 10% de sus ingresos anuales durante 40 años habría logrado acumular más del 850% de sus ingresos disponibles. En comparación, la generación X, que enfrentó una economía menos estable, alcanzó solo el 606% de sus ingresos en ahorros. Sin embargo, el escenario para los millennials es aún más desafiante.

Para los millennials, la realidad económica ha sido otra. Esta generación ha soportado crisis como la financiera de 2008, la pandemia de COVID-19 y un período reciente de alta inflación. Estos eventos han erosionado sus ahorros, dejándolos con una perspectiva de acumulación de solo el 430% de sus ingresos disponibles. Aunque les quedan más años para ahorrar, el informe sugiere que no será suficiente para igualar la riqueza de los baby boomers.

Ante esta perspectiva desalentadora, los millennials podrían encontrar en la herencia una posible salvación. La consultora Knight Frank estima que unos $90 billones podrían ser transferidos a esta generación en el futuro, colocándolos en posición de competir por el título de la generación más rica. Además, la Generación Z, nacida en los 2000, podría superar a los millennials si logran alcanzar el 766% de sus ingresos en ahorros para el 2063.

Así, mientras los baby boomers cierran su ciclo como la generación más rica, los millennials y la Generación Z enfrentan sus propios desafíos. La carrera por la acumulación de riqueza sigue abierta, pero con el camino cada vez más complicado.