La seguridad ciudadana de Guayaquil se encuentra en riesgo. Las bandas narcocriminales, en un intento por evitar ser identificadas, están destruyendo las cámaras de vigilancia de la ciudad, según denuncia la Corporación para la Seguridad Ciudadana de Guayaquil (CSCG).

La acción destructiva se centra particularmente en los distritos de Nueva Prosperina y Distrito Sur, conocidos por su alta incidencia de violencia y proximidad al Puerto Marítimo. Andrés Sandoval, director ejecutivo de la CSCG, reveló que se está llevando a cabo un levantamiento de información para adoptar medidas alternativas que resguarden estas cámaras, como su instalación a mayor altura o ubicación en puntos estratégicos.

El Municipio de Guayaquil cuenta con un centro de monitoreo que vigila las imágenes de 41,000 cámaras ubicadas en distintos puntos de la ciudad, incluyendo buses urbanos, taxis, semáforos, unidades y estaciones de la Metrovía. Sin embargo, 4,100 de estos dispositivos se encuentran inoperantes debido a los ataques de las bandas criminales que buscan eliminar cualquier registro de sus actividades ilícitas.

La destrucción de estas cámaras resulta en puntos ciegos que facilitan las actividades delictivas, como la extorsión a negocios locales y la venta de drogas. En algunos barrios del sur, la ausencia de cámaras permite a los criminales moverse libremente y transportar drogas hacia el Puerto Marítimo sin ser detectados.

Para combatir esta situación, se están considerando medidas alternativas, como la utilización de bodycams por parte de los agentes durante los operativos conjuntos.