En medio de advertencias climáticas y la festividad de Obon, Japón enfrenta una oleada de compras compulsivas de arroz, desencadenando preocupaciones sobre la escasez del alimento básico. A pesar de que la advertencia inicial sobre un posible sismo de gran magnitud fue levantada, otros factores como tifones y altas temperaturas siguen influyendo.

Desarrollo El Ministro de Agricultura, Silvicultura y Pesca, Sakamoto Tetsushi, ha hecho un llamado a la población para comprar solo lo necesario, en un intento por estabilizar la demanda. Las reservas de arroz alcanzaron en junio su nivel más bajo desde 1999, exacerbado por un incremento en el consumo debido al récord de turistas extranjeros.

Información Clave La producción de arroz se ha visto afectada severamente por las altas temperaturas y la falta de agua, lo cual ha reducido las cosechas. No obstante, Sakamoto es optimista sobre la mejora de la situación: "El arroz está creciendo bien y esperamos que la cosecha pueda comenzar una semana antes de lo usual".

Conclusión A pesar de la situación actual, hay esperanzas de que la escasez se resuelva gradualmente. El arroz, siendo parte integral de la cultura japonesa y consumido en grandes cantidades anualmente, sigue siendo una prioridad nacional en términos de seguridad alimentaria.