En un importante golpe contra el crimen organizado, las autoridades ecuatorianas lograron detener a tres individuos que estaban involucrados en un caso de extorsión en la provincia de Guayas. Estos delincuentes habían solicitado la escalofriante suma de USD 50.000 a un empresario local, amenazando con atentar contra su vida y la de su familia si no cumplía con sus exigencias.

La Policía Nacional, en una acción rápida y efectiva, logró identificar y capturar a los extorsionadores, quienes habían utilizado tres teléfonos celulares para contactar a la víctima. La detención de estos criminales representa un duro golpe al crimen organizado en la región y envía un mensaje claro de que la ley prevalecerá sobre quienes intenten cometer actos delictivos.

Esta operación se produce en un momento en que el país ha sido sacudido por una ola de violencia atribuida al crimen organizado. El presidente de la República, Daniel Noboa, declaró el pasado 9 de enero un "conflicto armado interno" en respuesta a una serie de atentados y acciones violentas, incluyendo el secuestro y asesinato de policías, amenazas de explosiones, vehículos incendiados y motines en cárceles con toma de rehenes, quienes ahora han sido liberados.

Antes de estos eventos, José Adolfo Macías Villamar, alias 'Fito', líder de 'Los Choneros', una de las bandas más violentas del país, huyó, siendo catalogado por el Gobierno como un "terrorista". La búsqueda de 'Fito' desencadenó la oleada de violencia atribuida a estas bandas criminales, lo que ha llevado al presidente a tomar medidas drásticas para enfrentar esta amenaza.