Belén Gamboa, estudiante de 10º de Básica en la Unidad Educativa Teresa Flor de Ambato, es un símbolo de superación educativa.

Desde su nacimiento, Belén enfrenta la discapacidad visual con valentía. Ha roto barreras gracias al apoyo de su familia, docentes y compañeros.

"Me siento valorada. Ha sido un camino difícil, pero aprendí a vencer obstáculos. Gracias a todos por su apoyo", expresó Belén.

Sus compañeros incluso aprendieron braille para integrarla en el aula. Este esfuerzo colectivo destaca la importancia de la inclusión.

Belén utiliza tecnologías adaptativas y recursos inclusivos que fortalecen su aprendizaje.

Su maestra, Sandra Vinueza, asegura que la actitud positiva de Belén es un ejemplo para toda la comunidad estudiantil.

“Estamos muy orgullosos de ella. Es un desafío, pero también una motivación diaria", comentó la docente.

El Ministerio de Educación de Ecuador impulsa programas de inclusión para estudiantes con necesidades específicas.

El caso de Belén refuerza el compromiso por una educación inclusiva y accesible.

Historias como esta inspiran y demuestran el poder transformador de la educación.

La escuela Teresa Flor se convierte en un ejemplo a seguir, gracias al trabajo conjunto entre estudiantes y maestros.

La dedicación de Belén refleja cómo la unión y la inclusión pueden cambiar vidas.

Este ejemplo marca un camino para muchas instituciones educativas en Ecuador.

Belén sueña con un futuro donde su discapacidad no sea una barrera.

La comunidad educativa reafirma su compromiso con la igualdad y la inclusión.

Belén es la prueba de que con esfuerzo, todo es posible.