El mediodía del lunes 21 de julio fue de terror en el sur de Quito cuando un torbellino destruyó el refugio Lucky Bienestar Animal. El viento voló techos, arrancó láminas de zinc y tumbó perreras, dejando a unos 900 perritos sin resguardo. La infraestructura del refugio colapsó y los rescatistas debieron actuar de inmediato. Algunos perros quedaron atrapados entre escombros, otros corrieron asustados por el fuerte viento y la lluvia. El refugio compartió su dolor en redes, mencionando el sufrimiento de los animales al perder su lugar seguro. Varias mascotas fueron llevadas rápidamente a una veterinaria para ser atendidas. Los daños materiales fueron graves y la angustia se apoderó de quienes cuidan a los peluditos. Lucky Bienestar Animal siempre ha funcionado con lo justo, y ahora la emergencia es total. No tienen fondo de emergencia y necesitan reconstruir perreras y techos de inmediato. El refugio pidió ayuda a la comunidad, solicitando materiales, manos voluntarias y donaciones de cualquier tipo. Se busca asegurar comida, medicina y un techo digno para los animales afectados. La tragedia generó una ola de solidaridad en redes sociales, donde la gente pregunta cómo ayudar. La urgencia es alta porque los perritos están vulnerables al clima y necesitan atención veterinaria. El refugio agradeció cualquier colaboración y espera que pronto puedan levantar de nuevo el hogar de estos fieles compañeros. Si quieres ayudar, comunícate directamente con Lucky Bienestar Animal para aportar con lo que puedas. La prioridad es reconstruir y devolver seguridad a estos 900 perritos que hoy lo perdieron todo.