¿Adiós a la libertad de vestimenta en China? Las alarmas se han encendido en el mundo de la moda y la expresión. Según fuentes oficiales, las autoridades chinas están valorando la posibilidad de modificar una ley que, de aprobarse, prohibiría la ropa y símbolos que, según consideren, "hieren" los sentimientos de la nación. Esta nueva medida se añade a una lista ya controversial de acciones que ponen en tela de juicio la libertad de expresión en el país, como la reciente ofensiva contra los tatuajes y artistas con estilos "afeminados".

El Comité Permanente del Congreso Nacional del Pueblo, en declaraciones recientes, argumenta la necesidad de evaluar cómo ciertos estilos y símbolos pueden ser "dañinos para el espíritu" nacional. La incertidumbre rodea el tipo exacto de prendas que podrían entrar en esta lista negra, pero los infractores podrían enfrentar multas de hasta 5.000 yuanes (aproximadamente 681 dólares) y hasta 15 días de detención.

La propuesta ha desencadenado un torrente de críticas y preocupaciones sobre la posible infracción de derechos. Lao Dongyan, profesor de derecho penal de la Universidad Tsinghua de Beijing, ha manifestado su preocupación: "El poder del Estado está interfiriendo en cómo los ciudadanos se visten diariamente. Es una intervención excesiva". Otros opinan que esta acción podría incitar un ferviente nacionalismo, convirtiendo la moda en un campo de batalla político.