El Monumento del Parque 12 de Noviembre fue presentado como un símbolo de libertad que ha presenciado grandes cambios desde 1920. Este espacio antes funcionó como una bulliciosa plaza comercial y estación de tren. Allí se recordó el coraje y el sacrificio de quienes lucharon por la independencia de Ambato el 12 de noviembre de 1820. La historia del parque comenzó en 1920, cuando se colocó el primer monumento por el centenario. En 1923, el diseño de Celiano Monge presentó una estructura más baja con un cóndor majestuoso en la cúspide. La remodelación de 1930, a cargo del arquitecto José Mideros, añadió un foco lumínico en la cima. Ese foco representó la flama de la libertad. En 1942, durante la feria interprovincial organizada por la Cámara de Comercio de Tungurahua, la columna fue elevada. Ese año se incorporaron grabados de inspiración grecorromana. También se instaló un faro de vidrio y metal. En 2004, el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural declaró al parque y su monumento como bien inmueble patrimonial de la nación. En 2007 se reemplazó la antigua pileta por un moderno espejo de agua. En esa intervención se añadieron muros con arcos dorados. En los arcos se colocaron los nombres de los próceres de la libertad. El Proyecto Bicentenario de 2021 incluyó la regeneración del parque. La intervención alcanzó también la avenida 12. Cada etapa dejó huellas visibles en la columna, el faro y su entorno inmediato. El conjunto urbano mantuvo su función cívica y su carga emotiva para la ciudad. El lugar conectó la memoria del 12 de noviembre de 1820 con la vida diaria de Ambato. Así se sostuvo un punto de encuentro donde la historia se mira de frente.