Trump activa músculo militar contra cárteles en el Caribe


El plan prevé operar en aguas y espacio aéreo internacionales con aviones P-8 y al menos un submarino de ataque.
Washington prepara el arribo de buques de guerra a Venezuela, según Reuters. La movida llega tras el anuncio del presidente estadounidense Donald Trump de usar a las Fuerzas Armadas contra bandas de narcotraficantes catalogadas como organizaciones terroristas globales. El despliegue ya se nota en el Caribe con presencia militar creciente. De acuerdo con Reuters, los navíos serían el USS Gravely, el USS Jason Dunham y el USS Sampson. Estas unidades llegarían al país caribeño en menos de 72 horas. Un funcionario estadounidense independiente dijo que unos 4.000 marineros e infantes de marina se sumarán al esfuerzo en el sur del Caribe. El mismo funcionario, bajo anonimato, detalló que el paquete incluiría aviones espía P-8, buques de guerra y al menos un submarino de ataque. El envío de marines y barcos hacia las costas venezolanas se extendería durante varios meses. El plan contempla operar en aguas y espacio aéreo internacionales. Los activos navales servirían para inteligencia y vigilancia. También podrían usarse como plataforma para ataques selectivos si se toma esa decisión. The New York Times informó que Trump habría firmado una orden secreta para utilizar la fuerza militar contra cárteles en América Latina. Esa directriz daría una base legal para operaciones directas y unilaterales en territorio extranjero. Fuentes citadas por el diario señalaron que el alto mando ya trabaja en los planes de ejecución. El tema abre dudas legales sobre posibles muertes de civiles en acciones sin autorización del Congreso. La decisión se enmarca en la ofensiva de Trump contra el tráfico de fentanilo que, según Washington, es producido por cárteles mexicanos con precursores de China y llega a Estados Unidos. El Gobierno designó en febrero como terroristas a seis cárteles mexicanos, además del Tren de Aragua y la pandilla MS-13. En julio sumó al Cartel de los Soles, que Caracas rechaza, y el Departamento de Justicia elevó a 50 millones de dólares la recompensa por información que lleve a la captura de Nicolás Maduro. También intensificaron vuelos secretos de drones sobre México para ubicar laboratorios de fentanilo, con prohibición de fuerza letal en esos operativos. La presidenta mexicana Claudia Sheinbaum expresó apertura a cooperar en seguridad, con insistencia en el respeto a la soberanía de su país.